¿Quién puede decir que no tiene recuerdos de infancia en los que las gallinas son las protagonistas? ¡Muy pocos! De hecho, mucho tiempo para criar estos animales del establo era una práctica muy extendida entre quienes tenían suficiente espacio, quizás viviendo en el campo. No es difícil encontrar en la memoria un tío o una abuela que criaron pollos, junto con otros pequeños animales de corral. Sin embargo, hoy en día se ha vuelto mucho más raro y, de hecho, las gallinas se eligen cada vez más a menudo como mascotas.
Gallinas que huyen del establo: porque cada vez se encuentran más a menudo en casa
En el imaginario común la gallina aparece en un contexto rural, rodeada de las aves de corral que los criadores y ganaderos cuidan para alimentar. Por lo tanto, tradicionalmente se percibe a la gallina como un animal que da sustento al hombre, utilizado para sobrevivir alimentándose de sus derivados o mediante la comercialización de huevos. Hoy, sin embargo, esta visión de la gallina ha cambiado mucho y cada vez más estos animales se vuelven reales. mascota mascota. No se excluye que incluso los granjeros se apeguen a las gallinas y las mantengan con ellas incluso cuando, debido a la vejez, ya no producen huevos.
Sin embargo, hoy estamos asistiendo a un fenómeno muy diferente, en el que personas que no tienen nada que ver con el contexto de la granja, optan por comprar unas gallinas para dejarlas correr por el jardín, como si fuera un perro o un gato. .
Este vuelco está motivado por los cambios que está viviendo nuestra sociedad, debido a la introducción de la lógica industrial y la agricultura intensiva, que ha reducido considerablemente la necesidad de contar con la propia. cría doméstica. Sin embargo, esto también ha provocado un aumento de la sensibilidad de las personas hacia las condiciones de salud de estos animales, que los grandes minoristas suelen tratar como objetos, obligándolos a vivir situaciones inhumanas que afectan no solo su bienestar mental sino también físico, requiriendo el uso de drogas que luego el comprador consume cuando compra una pechuga de pollo o huevos en el supermercado. Hoy en día la gente ha tomado conciencia de las condiciones reales de las explotaciones intensivas y, tanto por un tema de salud como por una mayor sensibilidad hacia los tratamientos animales, suele optar por tener su propio rebaño de animales. gallinas domesticas.
Gallinas domésticas, de jardín y de apartamento
Por lo tanto, aumenta el número de personas que regresan a las pequeñas granjas de traspatio, recurriendo a gallineros para gallinas domésticas para colocar en el jardín. A menudo sucede que estos jardines pertenecen a propietarios que viven en la ciudad o, en cualquier caso, ciertamente no a agricultores, por lo que las clásicas jaulas de patio se reemplazan por gallineros modernos y de diseño, cuidadosamente terminado y capaz de darle al jardín un toque elegante, casi como si se tratara de una hermosa caseta para perros.
Sin embargo, el fenmeno de gallinas en la casa: ya sea un apartamento o una villa, las diferentes especies de gallinas son bienvenidas en el interior, convirtiéndose en reales. mascota mascota. Esto lo permite sobre todo el carácter de estos animales, que conviven con el hombre desde hace milenios. La gallina es buena, tranquila, dócil y se las arregla para relacionarse eficazmente con los niños. No son raros los casos de terapia con mascotas en los que la gallina se utiliza para ayudar a niños autistas o incluso a ancianos. En cualquier caso, el fenómeno de gallina mascota sigue siendo un nicho, pero marca una tendencia interesante, que habla de cómo nuestros hábitos pueden cambiar con el contexto en el que vivimos.
